MAGIA BENDITA *

Un pensamiento y una mirada despiertan las letras inquietas 

que viven en mí, en la esperanza de un nuevo amanecer. 

Cuanta ternura envuelta en magia bendita, encerrada 

en la voz única que estremece los sentidos,

cuando me vives en cada letra y en mi cielo que esta 

en el suelo, en mis caricias, en el aroma que no producen 

colores en la piel y acarician la respiración, en los sentimientos 

sinceros y en los silencios sueños que en un segundo te pierden 

y te encuentran. 

En las melodías románticas del piano que armoniza este instante, 

en ese aroma dulce, en los pétalos de rosas multicolores 

con pequeña danza de besos que deslumbran las sonrisas.

Con mil estrellas en las manos y suspiros constantes que se hunden 

en todos los rincones del alma, aspirando el perfume embriagante 

de las manos inquietas, de las mirada sinceras que tienen la pasión 

oculta, de ese tú nombre que besa mis cuello y salpican de brisa 

mi sonrisa, de ese amor que no se pierde y no precisa hablar 

solo abrazarte fuertemente hasta que nos sorprenda el amanecer.

Porque mi amor esta en el aire, esta en los segundos de cada hora, 

en el silencio que te envuelve, en la música que escuchas, en tu voz, 

en las huellas que jamás se borraran, en los porqués, en los años 

que pasan, en tú piel que es el eco de mis pensamientos, en ese amor 

que siente los latidos del corazón, en el abrigo del virtual instante 

en el que te respiro, en ese aire que huele a ti, en la vida que sabe a ti.

CUANDO TE HAGA FALTA. *

Búscame cuando te haga falta mi sonrisa,
cuando tú piel se erice y te hagan falta mis
palabras, búscame en tus sueños, en esa
misma vida que esculpiste para mí.
Búscame en el firmamento inmenso que tapizó
nuestros días, allá mismo, donde el juicio no alcanzó
en el ultimo peldaño, en el hemisferio izquierdo
de tu pecho, donde se oculta esa llama que calienta
los inviernos crudos, en esas noches que no tengas
más remedio que cerrar los ojos y soñar tibios sueños.
Búscame cuando mires mi ventana y sin darte cuenta
me busques con la mirada.
Búscame en el filo de las letras, en esas que encienden
el alma, en el rincón de las emociones, en los espacios
mínimos que hay entre ellas, en los vientos que soplan
y le dan sonido al silencio.

Búscame allá mismo donde te encontré cuando me falto
tu sonrisa, cuando mi garganta se seco de tanto aclamar
tu nombre, en ese perfume que emana de tu piel, en los
besos atrevidos, en los suspiros sin motivo, solo búscame
en los rincones olvidados de tu corazón.
Búscame en esta misma vida, en ese mismo espacio
dentro de ti, donde no llegue la razón.
¡Búscame! Cuando tu boca se endulce con mí ligera
sonrisa,  cuando olvide tu timbre por no sentir el arrullo
en tu voz. Allá nos encontraremos en el más infinito
espacio, cuando tú piel se erice y te hagan falta
mis palabras. ¡Buscame!.

NOS BUSCAMOS SI. *

A veces descubro tu nombre, a veces creo que son 

letras sin voz envuelto en inmensas sabanas azules, 

en olas que danzan felices sobre el viento, en suspiro 

que gritan tu nombre, siempre en esa espera entre mirar 

la hora y volver a mirarla un instante después perdiendo

la noción del tiempo con el resto del mundo, en ecos 

que rompen el silencio y llega hasta el rincón más profundo,

donde nos buscábamos en las palabras que se pierden 

cuando no son escritas. 

Nos buscamos si, y no es que me sobre espacio, es que me

faltas tú para escribir, repetir y gritar tu nombre. 

Es la impaciencia que inunda mi boca, en silenciosas voces 

que cantan tu nombre, cuando el amor 

no es más que escribir y buscarte en los brazos de la noche.

Nos buscamos si, en los brazos que se visten de luz. 

Nos buscamos, siempre nos buscamos, cada vez que nos 

pensamos y cada vez que nos amamos, cuando cruzamos 

las miradas, cuando unimos nuestros labios, en las manos

impregnadas de fragancia que espigada queda en cada

parte de ti. 

Nos buscamos si, como la luna al mar reflejando su belleza. 

Nos buscamos, si, bajo la almohada, entre las sabanas azules

que flotan en las nubes, en el amanecer y en la oscuridad,

con un solo proposito; unir tu alma con la mía y sentir la piel

que palpita en ese cause que existe y desborda el alma,

buscando de a poquito ese lugarcito para vivirnos,

para soñarnos y amarnos; simplemente nos buscamos 

y nos encontramos en cualquier parte del cuerpo o del alma,

donde exista el más puro olor que nos da el amor.

CADA VEZ MÁS MÍO.

Tras luna de pasos gigantes más que mirarte te presiento,
y a través de esa distancia te llevo en mí, en esa música
misteriosa que devora cada instante tú perfume tan lleno
de ti. 
En el encuentro de nuestras almas noctámbulas, 
en la orilla de tú rostro llenas mis ansias de paz.
Te presiento mío en la lluvia que despacio cae 
en las aceras, en caminos que van dejan huella en calles 
vacías, en la punta de mis ánimos, te presiento en un solo 
momento y en una sola dirección, en esos pasos que van 
contigo, esta noche, en ese camino donde quiero 
yo arribar. 
En el simple placer de sabernos bajo el mismo cielo 
que nos cobija. Te presiente y te busco en el aire que respiro,
en el aire fresco donde cada ser busca su destino, en este mar 
de palabras y de besos, en la noche rasa de azules y cálidos 
destellos, en la esencia misma de la vida, donde nosotros 
somos uno solo.
Me detengo para escribir al calor de las exitadas ideas
que surgen de ese aroma que te identifica, despertando mis ganas
de besar tu sonrisa en sus esquinas, y en tu espacio latente amar
tú alma oculta que flota de tanto amor, donde se dibuja la presencia
de tus huellas enredadas en las mías. Es preferible estar así  y caminar
de tu mano, es preferible así, solo caminar a tu lado, marcando nuestro camino pausado y encontrar las huellas que en la distancia han dejado tus pasos. 
Te presiento mío y cada vez más mío.