Mis letras no sienten las manos que tocan
el cielo y mi mejor poesía anhela la luz del alba
queriendo despertar del sueño que la adormece.
Tocando los silencios que en mi boca se esconden
y en los ojos como espejo se reflejen ilusiones atrapadas.
Melancolía de un corazón enamorado.
Así brillan mis pensamientos, vez con vez, día a día,
otras espían, anhelante de besos, besos que existirán
cuando se escriba mi mejor poesía, con el sosiego
de mi alma, poniendo amor en mis letras y fuego
en mi boca, pensamientos que se liberan
con tu presencia y se quedan presos con tu ausencia.
Porque aún no esta escrita mi mejor poesía.
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